Colocar tu negocio, emprendimiento o proyecto personal en internet es algo que en estos días podría considerarse como imprescindible. Vivimos en una era en la que la presencia en la web es sinónimo de vigencia, confiabilidad y solidez. Una marca sin presencia en la gran red de redes es inconcebible.
Cuando un visitante entra a tu página web, se hace una primera idea de quien eres, que representas, que vendes, y cuales son tus fortalezas. Por eso es importante que se trabaje en un diseño web que no solo sea atractivo desde lo estético, sino tambien práctico de navegar y funcional. Es lo que se conoce como «buena experiencia del usuario».
Sin embargo, el diseño y la funcionalidad de un sitio web no lo es todo. Hay que tener presentes otros elementos. Uno de ellos es el nombre de dominio: Un buen nombre de dominio debe ser fácil de recordar y atractivo. Lógicamente las empresas deben utilizar su nombre comercial en el dominio por un tema de branding.
El segundo aspecto a tener en cuenta para tener una exitosa presencia web es el alojamiento o hosting. Los sitios web son código de programación alojado en servidores, que son ordenadores especializados en alojamiento. Para ello tienen la infraestructura necesaria: Sistema operativo, procesadores, memoria RAM y medios de almacenamiento solo por citar unos cuantos recursos.
Un tema de recursos tecnológicos
A la hora de alojar un sitio web existen varias alternativas que dependen de los requerimientos del sitio en cuestión, entre estos están por ejemplo el número de visitas diarias (tráfico), la cantidad de contenido alojado, la calidad de contenido alojado, el tipo de interacción con el usuario (por ejemplo hay tiendas virtuales que reciben pagos en línea), etc.
Según el nivel de interacción y de recursos que se necesitan, el alojamiento puede ser en servidores dedicados, cuando se tiene un alto tráfico y un consumo de recursos como CPU y RAM elevados. Esta es la opción ideal para marcas y sitios ya consolidados que esperan un flujo alto y constante de visitas o un gran consumo de recursos.
Por otro lado, quienes están recién consolidando una marca o un proyecto, pueden perfectamente optar por una opción más económica y de momento eficiente, como es el hosting compartido. En esta modalidad el sitio web comparte recursos con otros sitios web, aunque su manejo es bastante personalizado.
Características de un buen alojamiento web
Un buen hosting debe cumplir con ciertas características básicas como señalan los expertos de X5 Servers, una de las empresas de hosting líderes. Esto es importante no solo para la experiencia de usuario sino también desde el punto de vista del SEO, es decir, lo bien o mal que lograrás posicionar tu sitio en los resultados de búsqueda de los motores como Google.
Estas características esenciales incluyen parámetros como tiempos de carga breve, hosting cpanel, ancho de banda suficiente, espacio de almacenamiento suficiente, bajo downtime, escalabilidad, backups o respaldos y finalmente algo que también resulta muy importante: un buen servicio de atención al cliente.
Finalmente, X5 Servers ofrece múltiples canales de atención a sus clientes: chat, teléfono, email y tickets.