Si analizamos el volumen de compras en internet de hace diez años y lo comparamos con los datos de la actualidad, encontraremos una verdad innegable que supera incluso las predicciones mas optimistas de los gurús del internet de entonces: las compras por internet han crecido, en algunos rubros, de forma exponencial.
Sitios como Ebay, Amazon, OLX, Mercado Libre o AliExpress y Wish están allí para dar testimonio de la bonanza de las ventas por internet. Sin embargo , el E-Commerce ha generado sus propias reglas evolutivas y es así que vemos como nace una modalidad de comercio que democratiza y pone al alcance de prácticamente todos, la posibilidad de montar una tienda en línea y vender productos sin necesidad de tener un stock en el almacén. Estamos hablando del dropshipping.
Gracias al dropshipping, cualquier emprendedor con poco capital puede poner en marcha un sitio de ventas conectando a los clientes con los mismos fabricantes o vendedores al por mayor. Quien maneja un sitio de dropshipping ni siquiera debe encargarse del envío, pues esto también lo realiza el fabricante o distribuidor.
Podría creerse que el minorista, quien hace dropshipping, es solo un intermediario pero en realidad le otorga valor al producto mediante publicidad, feedback con el cliente e incluso aportando manuales y tips para el uso de los productos.
No es marketing de afiliados
Muchos emprendedores que se topan por primera vez con el concepto de dropshipping, creen que se trata de un tipo de marketing de afiliados. Nada más alejado de la verdad: en el marketing de afiliados, el intermediario solo enlaza o redirige al cliente a un sitio de ventas, comúnmente del mismo fabricante. Es en este sitio donde se concreta el proceso de compra, es decir la transacción.
En el dropshipping, la transacción se lleva a cabo en los mismos dominios o canales del intermediario.
Shopify. La tienda de comercio por excelencia
Aunque hay varias tiendas de comercio listas para instalar en internet, destaca notoriamente Shopify, una alternativa de origen canadiense que permite instalar una tienda de comercio electrónico con aspecto y prestaciones extraordinarias. Aunque es una plataforma de pago, vale la pena la inversión por la cantidad de opciones de personalización que posee, ademas de un soporte de primer nivel.
Shopify puede instalarse en un dominio de la propiedad de intermediario o minorista, pero también ofrece subdominios dentro de sus servidores, está última alternativa tiene algunas ventajas.
Siendo una plataforma tan completa, Shopify se complementa perfectamente con Oberlo, una aplicación pensada para importar una exuberante gama de productos hacia Shopify con solo unos cuantos pasos.
Oberlo importa productos desde Oberlo Supply Marketplace y AliExpress. El proceso es bastante intuitivo y los paneles son amigables, permitiendo un control absoluto que va desde la personalización de la presentación de los productos hasta el seguimiento de las ventas.
El secreto del éxito en el dropshipping: La perseverancia
El dropshipping requiere de una buena dosis de perseverancia. Sin embargo, si se exhiben productos estrella con gran demanda, es solo cuestión de tiempo (usualmente días) que los pedidos comiencen a llegar. Las redes sociales juegan un papel muy importante para viralizar los productos y ya depende de la habilidad e ingenio de cada emprendedor, el aderezar sus productos con descripciones, imágenes y vídeos que enganchen a los futuros compradores.