Consejos para el correcto cuidado de un microscopio

El microscopio es un instrumento de alta precisión y bastante complejo que tiene distintos campos de aplicación, desde el examen de muestras minerales hasta el estudio de células y tejidos de origen animal, mineral o del reino monera. En general, un microscopio es un instrumento útil para observar elementos tan pequeños que no podríamos ver a simple vista, tal como nos explica el sitio www.microscopio.info

Como se puede deducir, los microscopios son instrumentos muy importantes dentro de los distintos campos de investigación y trabajo relacionados con la ciencia. Son instrumentos de uso cotidiano en escuelas, universidades, institutos, centros de investigación, hospitales y también en fábricas.

Según el grado o nivel de complejidad de la investigación realizada por los distintos centros de enseñanza, científicos o industriales, se requerirán microscopios con diferente nivel de complejidad y sofisticación. Esta es la razón por la cual existen diferentes tipos de microscopios, siendo algunos de ellos bastante sencillos y otros extraordinariamente complejos.

Sin importar el tipo de microscopio, el cuidado y conservación del mismo es de vital importancia ya que sus partes y componentes son bastante sensibles y frágiles. El descuido en el cuidado y mantenimiento de un microscopio podría verse reflejado en una pérdida consistente de su precisión o incluso en un deterioro crítico que finalmente lo puede convertir en inútil.

A continuación, mencionaremos algunos puntos importantes que hay que tener en cuenta para el correcto cuidado de un microscopio, independientemente de su grado de complejidad o valor económico.

  • Sostenerlo de forma adecuada. -Una de las principales fuentes de problemas con los microscopios, es su manejo descuidado. Hay que tener en cuenta que las partes de un microscopio son bastante sensibles y frágiles. Cuando se traslada un microscopio de un lugar a otro hay que sostenerlo por la base y por el brazo metálico de soporte. Jamás sostener un microscopio por el tubo de la lente y menos por la base de la platina.
  • El lente objetivo. -El lente objetivo se ajusta para obtener un foco correcto. Hay que tener mucho cuidado de no hacer descender mucho el lente objetivo a tal punto que contacte con la lámina en la platina. Esto podría no sólo ensuciar el lente, sino también dañarlo de forma permanente.
  • Guardarlo en un lugar seguro. -Es importante almacenar el microscopio en un lugar seco, limpio, con buena ventilación, pero no expuesto al polvo y partículas ambientales. El aire demasiado húmedo o, por ejemplo, cercano al océano, podría dañar con el tiempo algunos de los elementos mecánicos del microscopio. En los laboratorios, también es importante no guardar el microscopio cerca de compuestos químicos que puedan emanar vapores corrosivos o tóxicos.
  • Mantener el microscopio siempre cubierto. -Los microscopios siempre deben almacenarse cubiertos con un protector adecuado. Esto en especial es imprescindible cuando el microscopio se va a almacenar por un periodo relativamente largo del tiempo o se va a trasladar de un sitio a otro. La mayoría de microscopios vienen de fábrica con sus propios cobertores y en la medida de lo posible deberían usarse estos.
  • Mantener limpias las partes ópticas. –  Una de las técnicas empleadas para incrementar el poder de magnificación de un microscopio incluye la inversión en aceites o sustancias oleaginosas. Mediante este método, se sumergen en un aceite de índice de refracción alto, tanto las muestras como el lente objetivo. Luego de procedimientos como este, es obligatorio hacer una cuidadosa limpieza de las superficies sumergidas en estas sustancias, evitando el uso de solventes inapropiados. Los mismos fabricantes de microscopios suelen vender los agentes limpiadores ideales para este tipo de procedimientos.
  • La limpieza de microscopio en general. -Para limpiar el cuerpo del microscopio se puede utilizar un aspirador de aire de baja o mediana intensidad. Las partes ópticas se pueden limpiar empleando papel especial para componentes ópticos, embebido en agua destilada o en soluciones de limpieza fabricadas para tal propósito. Se debe evitar utilizar paños o papeles ásperos que puedan dañar el perfecto pulido de la superficie de los componentes ópticos. Los movimientos de limpieza deben ser suaves y circulares.
  • Cuidado de las lámparas de iluminación. -Luego de utilizar el microscopio, se debe apagar la lámpara de iluminación y debe permanecer apagada mientras no se esté usando. Esto extenderá su tiempo de vida evitando que tengamos que invertir innecesariamente en repuestos.